La concientización es el proceso de reconocer y aceptar la realidad de nuestra situación como personas que sufren de una adicción, y de tomar la decisión de cambiar para mejorar nuestra calidad de vida. En esta fase, se trabaja en dos aspectos fundamentales: el cambio de juicios y actitudes, y el reencuentro familiar.
El cambio de juicios y actitudes consiste en modificar la forma en que pensamos y sentimos sobre nosotros mismos, sobre nuestra adicción y sobre las personas que nos rodean. Se trata de dejar atrás los pensamientos negativos, las creencias limitantes, las justificaciones y las excusas que nos impiden avanzar. Se trata de adoptar una actitud positiva, proactiva, responsable y comprometida con nuestra recuperación. Se trata de reconocer nuestros errores, aprender de ellos y pedir perdón cuando sea necesario.
El reencuentro familiar es el proceso de restablecer los vínculos afectivos con nuestros seres queridos, que se han visto dañados por nuestra adicción. Se trata de recuperar la confianza, el respeto, la comunicación y el apoyo mutuo que son esenciales para una convivencia sana y armoniosa. Se trata de sanar las heridas emocionales, expresar nuestros sentimientos y necesidades, y escuchar y comprender los de los demás. Se trata de compartir momentos de calidad, disfrutar juntos y celebrar los logros.
La concientización es una fase clave para lograr una recuperación exitosa y duradera. Es un paso necesario para pasar de la negación a la aceptación, del aislamiento a la integración, del sufrimiento a la felicidad. Por eso, quiero felicitar a todas las personas que están en esta fase, y animarlas a seguir adelante con fuerza y esperanza. También quiero agradecer a la Clínica Ser Libre por su excelente labor y su apoyo incondicional a las personas que luchan contra las adicciones.